EL MISTERIO DE LA SERPIENTE GIGANTE( por Lidia)
Un día, dos amigas llamadas Elena y Lorena iban a participar en una carrera de bicicletas que duraba dos días. Se habían colocado en la línea de salida con los demás ciclistas cuando, Elena vio acercarse a Rodrigo, un compañero suyo del colegio. Se saludaron y se desearon suerte. Cuando sonó la señal de que la carrera había empezado, todos los ciclistas que estaban en la línea de meta, empezaron a pedalear.
Cuando llevaban ya un rato pedaleando, todo el suelo empezó a temblar y, de las profundidades de la tierra, salió una serpiente gigante que hizo tropezar a varios ciclistas y pinchó las ruedas de otros cuantos. Cuando estaba casi detrás de Elena esta le lanzó unas cuantas piedras al animal. De donde había tirado las piedras, salió un líquido grisáceo por el cuerpo del animal. Seguidamente, la serpiente se dio la vuelta y se metió en la tierra.
- Qué raro - dijo sorprendida Lorena- Aquí pasa algo raro y lo vamos a investigar.
Cuando llegaron a la posada donde iban a dormir, estaban todo los ciclistas hablando de la serpiente.
- A mí me pinchó una rueda- dijo uno.
- Pues a mí me hizo caer- dijo otro.
Ellas no hablaron nada porque estaban muy cansadas. Mas tarde, se fueron a sus habitaciones pensando en todo lo que había ocurrido ese día.
Al día siguiente, después de desayunar, fueron a coger las bicicletas que habían dejado el día anterior en el aparcamiento. Allí se encontraron a Rodrigo con quien hablaron un rato. Después de hablar, cuando Rodrigo se marchó, Elena se quedó mirando fijamente la bicicleta de Rodrigo.
- ¿Lo has visto?- preguntó Elena.
- ¿El qué?-dijo Lorena sorprendida.
Elena movió la cabeza negativamente.
- Nada- dijo Elena.
Siguieron pedaleando un rato hasta que, como la vez anterior, salió la serpiente gigante de la tierra. Elena y Lorena tenían un plan para descubrir al culpable.
- Ya- exclamó Elena.
Entonces, Lorena sacó de su bolsa una cuerda muy grande con la que atraparon a la serpiente. Se oyeron gritos de auxilio dentro de la serpiente. Cuando salió el culpable resultó ser...
- ¡Rodrigo!- exclamó Lorena.
- Lo sabía- dijo Elena triunfante- El líquido que salió de la serpiente, era el mismo que el aceite que vi en el la rueda de la bicicleta de Rodrigo.
- Si, así es- dijo Rodrigo entristecido-Quería ganar la carrera.
Finalmente no se lo dijeron a nadie y ganaron la carrera. Había sido una carrera fantástica.